Me pregunta: Antonio, 38, de Lince
Las cenas románticas me encantan y antes me ponían nervioso. Te cuento que, un jueves a las 8pm, tenía que llevar a cabo una cena muy esperada por mí. Mi persona especial, ¡al fin había dicho que sí!, ¿y qué mejor manera de demostrar lo importante de esta cita que cocinando? Definitivamente estos son momentos que nunca olvidaré. El aire está lleno de emoción mientras se cuida cada detalle para una cena romántica inolvidable.
Todo parecía estar en su lugar, pero a medida que el tiempo avanza, los nervios te embriagan.
Lamentablemente, el entusiasmo desmedido se convierte en tu peor enemigo, fue así como en un descuido fugaz, dejé olvidada la sartén en la cocina, me inundé en un caos de humo, los ojos me ardían y, además, los secadores que dejé cerca de la cocina empezaron a encenderse. ¡Oh no! ¡Esas no eran “las llamas desenfrenadas” que esperaba esa noche!
Finalmente, mi cita llegó y no fue como imaginé, pero, me acompañó a reparar los estragos de esa agitada noche.
Ya sabes, si tu cena romántica empieza a arder, solo queda cancelar o adaptar los planes, llamar a los bomberos y buscar un seguro de hogar adecuado.
¡Saludos!