Si sientes que te crujen las rodillas o tienes un dolor frecuente en la espalda, ello no significa que estás envejeciendo deprisa. A cualquier edad puede uno pasar estos malestares. Pueden aparecer en situaciones de lo más cotidianas, por una mala postura en las largas jornadas de estudio o trabajo frente a la computadora, por cargar más peso de lo debido en un entrenamiento o por salir a correr sin previo calentamiento.
Para evitar que estos dolores se vuelvan crónicos lo mejor es tratarlos a tiempo. Según sea el caso, podrías llegar a necesitar atenciones frecuentes con el especialista, diversas medicinas, exámenes, y terapias físicas y de rehabilitación. Contar con un seguro de salud te aliviará con los gastos médicos y podrás tener una mejor recuperación.
Puedes contratar un seguro a tu medida y obtener diversos beneficios que van desde consultas ambulatorias, online o también a domicilio, que puedes agendar de inmediato, hasta participar en programas médicos dedicados a darle un seguimiento a tus molestias. ¡Siempre tu salud está primero!